Hoy no me sirve ni una amante, ni un maestro, ni una madre.
Hoy no pretendo recompensa ni castigo.
Tan solo necesito a un buen amigo
(Rafa Pons)
La amistad a veces está en una estación de tren en Madrid.
A veces en un banco de Getafe.
O en una mano que te abanica en una discoteca sin aire
acondicionado.
A veces en un abrazo después de subir 5 pisos con maletas y
a más de 30 grados.
O en el césped frío de un parque.
La amistad está ahí agazapada
Y cuando entra en acción,
sólo puedo mirarla agradecida