EL OTOÑO

El otoño es precioso, incluso diría que es la mejor estación del año…

Es cierto que está...
El verano con sus vacaciones, su playa y sus helados.
El invierno con la Navidad, los Reyes, la nieve…(cuando nieva que tampoco es que esté yo muy habituada a ver Madrid nevado)
La primavera con sus hojas verdes, sus jardines y sus florecillas.

Pero ¿y el otoño? ¡Pobre otoño! Está en medio de todo… no hace mucho calor, ni mucho frío, las flores se van igual que llegaron, la playa queda ya muy atrás y los Reyes están demasiado lejos todavía…

Yo estoy aprendiendo estos días a verle lo bonito al otoño: lo habitual, el día a día, las “vidas” y venidas por las calles de Getafe, las cosas de siempre con los de siempre.
Hoy me quedo, sin duda, con el otoño (no descarto que mañana prefiera la primavera…pero por ahora…:)

Hoy lo veo así...

En otoño el sol está ahí pero no molesta ni pica en la cara como en verano. El aire te roza la cara pero no es ese viento frío que te congela las orejas en invierno. Los árboles se vuelven medio-verdes-medio-marrones y el suelo parece una alfombra de hojas…y ya no están esas flores ostentosas que nacen en primavera y que traen con ellas estornudos y picores de nariz.

A mí me gustan los días de de otoño, de cielos azules con un sol tímido entre nubes, de brisas, de hojas balaceándose despacio hacia las calles…

Ayer fue un perfecto día de otoño y hoy lleva el mismo camino…

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Si la música es un estado de ánimo
¡Bienvenido al Paraíso!